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Instrumentos de política: la guerra contra guerrilla, contra insurgencia y contra terrorrista, 1940-1990
La dimensión militar en la dirección de los asuntos externos por EEUU, en la última mitad del siglo 20, se aprecia mejor de manera indirecta. La formidable maquinaria militar que emergió durante la Guerra Fría fue diseñada para el detente, para una guerra que se quería evitar. Sirvió, también para guerras convencionales, ocasionales y limitadas, para conflictos menores y demostraciones de fuerza. No obstante, la capacidad humana y de armamentos de esta formidable máquina de guerra fue sólo parte de la respuesta militar de EEUU a la Guerra Fría. Hay otra dimensión, casi a la sombra, que ha sido descrita como guerra secreta, guerra especial, no convencional o guerra política. Esta dimensión disimulada se ha tornado en instrumento para la acción militar permanente que, a menudo, evade el radar de la guerra a escala o la intervención abierta. Es otra forma de guerra que se libra continuamente bajo la paz mentida de la post Segunda Guerra Mundial. Michael McClintock analiza la guerra secreta como novedoso componente en los asuntos externos y en el manejo de la política doméstica de los países amigos de EEUU y su impacto en los escenarios secundarios de la Guerra Fría- inclusive del Tercer Mundo- donde las respuestas militares a los retos mundiales emergentes se mantuvieron inaccesibles al escrutinio público. El autor discute cómo las fuerzas armadas y la Agencia Central de Inteligencia, lograron hilvanar los hilos de esta guerra de nuevo tipo en el tejido de las relaciones internacionales.
